LAS MÁS BONITAS ORACIONES A MARÍA COMPUESTAS POR SANTOS Y DEVOTOS  oraciones a maría cortas

Hermosas oraciones a María: Inspiración para devotos y amantes de la fe.

Oraciones Amarillas de Santos y Devotos

Las más bonitas oraciones amarillas compuestas por santos y devotos:

Mariah mírame si tú me miras, él también me mirarán.

San Alberto Hurtado: "Oración a la Santísima Virgen de San Bernardo"

Bienaventurada amarilla, fijos están y estarán siempre en vos los ojos de los fieles. Como la grande obra que a todos los siglos interesan, en vos se encuentran los ángeles, la alegría, los justos, la gracia y los pecadores, el perdón con justicia. O si invocan todas las criaturas, porque en voz y por voz, la mano del omnipotente ha reproducido en cierto modo todo lo que antes había creado. Digna 2 admitir lo poco que yo puedo ofrecer, adiós y ofrecerlo por mí, para que por vuestra intercesión no sea rechazado. Amén.

Oración a la Virgen de San Epifanio: No sois, o María, la esposa de la Santísima Trinidad y el oculto tesoro de los bienes que dispensa la gracia, os ha sido concedida sin límites. Por vos se ha levantado Eva de su caída y Adán ha sido admitido en el Paraíso, de donde había sido arrojado por la culpa. Formo, santísima Virgen, y con vuestro socorro se ha concedido al mundo la paz celestial y contado los hombres como los ángeles en el número en los siervos de los amigos y de los hijos de Dios. Burgos ha sido rechazada la muerte, despojado el infierno, derribados los ídolos y propagado el conocimiento del cielo de nuestro divino Hijo por toda la tierra. Después, señora, interceder en nuestro favor para que así tengamos la seguridad de alcanzar algún día el inmenso bien que busco Saiz en toda su plenitud. Amén.

Oración a la Santísima Virgen de San Luís Gonzaga: O Mariah, soberana y señora nuestra, en vuestro misericordioso seno me arrojó con confianza. Y bajo esta santa custodia pongo sin reserva por todos los días de mi vida y a la hora de mi muerte: mi alma, mi cuerpo, mi esperanza y mi consuelo, mis penas y mis miserias, mi alegría y mi felicidad. Para que mis pensamientos, mis palabras y mis horas sean dirigidas según vuestra voluntad y la de vuestro adorable Hijo. Amén.

Oración a la Santísima Virgen de San Germán: Patriarca de Constantinopla, divina María, mi única soberana y después de Dios, mi verdadero consuelo en este mundo. Vos sois el rocío celestial que dulcifica mis amarguras, vos sois la brillante luz que disipa las tinieblas que rodean a mi alma. No sois la guía de mis pasos, la fuerza de mis debilidades, el tesoro en mi pobreza, el bálsamo que cura mis heridas, el consuelo que enjuaga mis lágrimas. Me refugio en las miserias y la esperanza de mi salvación, o Mariah, para tener piedad de mí. Vos que sois la madre de Dios que tanto amamos a los hombres, concédeme lo que os pido. Vos qué sois nuestra defensa y nuestra alegría, haced que yo sea digno de gozar con vos esta bienaventuranza que gozáis en el Cielo. Amén.

Oración a la Santísima Virgen de San Anselmo

Cielo, amén

Oh santa reina, elevada a tan alta dignidad por el Señor, te suplicamos que intercedas por nosotros para ser partícipes de las gracias que mereces. Misericordiosa madre, procúranos la felicidad que Dios ha querido para nosotros al hacerse hombre en tu casto seno. Acoge nuestras súplicas y ruega a nuestro divino hijo para que nos escuche y nos salve, si esa es tu voluntad. Amén.

Oración a la Santísima Virgen de San Germán

Acordaos, oh Virgen Santísima

Que tus siervos sostengan sus oraciones con firmeza y fe, y que todas las iglesias dispersas se unan en unidad. Haz que triunfe el reino de Dios y que la paz florezca en el mundo. Líbranos de todo peligro e indignación, y alcanza para nosotros la recompensa eterna. Amén.

Oración a la Santísima Virgen (Anónimo)

No sois Omar ni la verdadera mujer fuerte

Eres el verdadero templo de Dios, donde la salud del mundo comenzó y donde se efectuó la reconciliación entre Dios y el hombre. Eres el paraíso cerrado donde no pudo penetrar el pecado. Eres el hermoso jardín donde Dios ha colocado todas sus flores, incluyendo la hermosa violeta de tu humildad y la aromática rosa de tu caridad. Oh madre de gracia y de bondad, permite que lleguen hasta nosotros los beneficios de tu poderosa influencia, para que lavados en tus purísimas aguas podamos ser admitidos en el reino eterno y sin mancha. Amén.

Oración a la Santísima Virgen de San Alfonso Ligorio

Madre del dolor y del sufrimiento

Reina de los mártires, has llorado con lágrimas amargas la muerte de nuestro hijo inmolado por nuestra salvación. Te suplico que me alcances un verdadero arrepentimiento de mis pecados, un cambio de vida completo y una compasión tierna por los sufrimientos de tu divino hijo y los tuyos. Jesús y tú, aunque inocentes, han sufrido por mí. Haz que yo, que por mis pecados merezco el infierno, haga algo por ti. Divina madre mía, la aflicción que experimentas al ver a tu divino hijo...

Plegaria por una buena muerte

Inclinar la cabeza y expirar en la cruz, os suplico que me concedas una buena muerte. No desaparezcáis en aquel terrible trance, a mi alma afligida y combatida por todos sus enemigos. Por si no puedo, entonces invoco los dulces nombres de Jesús y de María. Los invoco desde ahora, Dios leal y santo, objeto de mi esperanza, que me socorres en mis últimos momentos. Amén.

Oración a la Santísima Virgen de San Alfonso de Ligorio

Madre afligida, no quiero que llores sola. Deseo unir mis lágrimas a las vuestras y, con este fin, os suplico que me consideréis un eterno recuerdo de la dolorosa pasión de Jesucristo y de la vuestra. Para que todos los días que me resten de vida no sean empleados en llorar por vuestros dolores, oh madre mía, oh madre del Redentor, significados hacer que estos dolores me inspiren una eterna confianza en la hora de mi muerte. Para no desamparar a la vista de mis pecados, que obtenga para mí el don de la perseverancia y, finalmente, el paraíso. Donde, en vuestra compañía, pueda cantar las infinitas misericordias de mi Dios y las vuestras. Amén.

Oración a la Santísima Virgen de San Bernardo

Poderosa soberana, venid a socorrernos en nuestra debilidad. Digna interceder por nosotros con vuestro divino hijo, nuestro Señor Jesucristo. Bien podríais hacerlo mejor que vos, su madre, que tan íntimamente conocisteis las dulzuras de su amor y su compañía en la tierra, y que ahora le poseéis plenamente en el cielo. Hablad a nuestro hijo, oh purísima Virgen, habladle, os lo suplicamos, porque a vos se escucha y os concede todo cuanto le pedís. Digna pedir para nosotros un gran amor de Dios, la perseverancia en su santa gracia y la felicidad de morir en su amistad. A fin de poderos ver y alabar con él eternamente. Amén.

Acción a la Santísima Virgen de San Bernardo

María, eres la que se eleva, bella como la luna y escogida como el sol. Oh María, os habéis venido al mundo como una aurora, despertando el resplandor de vuestra santidad, que ha precedido al sol de justicia. El día de vuestra aparición en el mundo ha sido el día de la gracia y de la salud. Sois bella como la aurora y, así como ningún planeta se asemeja tanto al sol como la luna, ninguna criatura se parece a Dios tanto como vos. Con ella disipáis las tinieblas de la noche con la luz que recibe del sol. Y vos, oh María, disipas nuestras tinieblas con el resplandor de nuestras virtudes. Pero vos sois aún más bella que la luna porque en vos no se halla mancha ni sombra. Sois escogida como el sol, es decir, como el sol divino que ha creado al sol. Habéis sido escogida entre todos los hombres. ¡Bosch! ¡Dulcísima María! No habéis sido entre...

Oración a la Santísima Virgen de San Alfonso de Ligorio

Todas las mujeres, nuestro dulce nombre, no se puede pronunciar sin sentirse inflamado de amor hacia vos y los que os aman no pueden pensar en vos sin que en su amor se aumente cada vez. Brindados concederme la gracia de que yo experimenté estos sentimientos que sois mis aspiraciones en la tierra para después amaros eternamente en el cielo. Amén.

Oración a la Santísima Virgen de San Bernardo

Cuán grande es vuestra gloria que podré yo decir para ponderar la. Si os comparó al cielo os veo a mayor altura. Si os llamo madre de las naciones me parece que este elogio es poco digno de vos. Te digo que sois la reina en los ángeles todo me prueba que merecéis este grande y honorífico título después. Omar y a la más sublime de todas las criaturas digna 2 hacernos participar de las gracias con que en este día habéis sido enriquecida. Atraernos por el dolor de vuestros perfumes para que invitemos nuestras virtudes las únicas que pueden darnos entrada en la mansión de las bienaventurados. Amén.

Oración a la Santísima Virgen de San Atanasio

Santísima Virgen y náusea escuchar nuestras súplicas, distribuir entre nosotros nuestros dones y darnos parte en la abundancia de gracia de que estáis llena. El arcángel os saluda y os llama llena de gracia. Todas las naciones nos llaman bienaventurada, todas las celestiales jerarquías los bendicen y nosotros desterrados en este valle de lágrimas también os decimos. Salve María llena de gracia, el Señor es con vos. Rogad por nosotros santa madre de Dios, reina poderosa y augusta soberana nuestra. Amén.

Oración a la Santísima Virgen de San Efrén

Como santa madre de Dios, digna 2 protegernos y conservarnos bajo las alas de vuestra piedad y nuestra misericordia. En vos tenemos toda nuestra confianza. Desde nuestra infancia estamos consagrados a vos como nuestra soberana. No sois el puerto en que nos refugiamos o virgen inmaculada, a vos nos ofrecemos eternamente y nos. Encomendamos en todas nuestras necesidades y en ellos confiamos en que nos oigáis y nos alcancéis el remedio que pedimos. Amén.

Oración a la Santísima Virgen de San Ireneo

Ponemos bajo nuestra protección para siempre. Amén.

Oración a la Santísima Virgen de San Buenaventura

Justa reina de los cielos, busque en virtud de vuestra poderosa rogativa de madre de Dios, podéis mandar a los potestades del infierno linda os mandar que impidan a los demonios causarnos el menor daño y hacer que los ángeles nos protejan y nos preserven de todo mal y de todo peligro. Amén.

Oración a la Santísima Virgen de San Bernardo

Mariah, haced que por vuestra mediación podamos acercarnos a vuestro divino hijo. Haced que el que por vos se ha dado al mundo nos reciba también por vuestra protección. Sois nuestra reina y nuestra mediadora, dignado recomendarnos y presentarnos a vuestro hijo adorable. Os lo pedimos por la gracia con que habéis sido honrada y por la misericordia con que os habéis manifestado al mundo. Haced que el que por vuestro medio se ha revestido de nuestras miserias nos haga por vuestros méritos partícipes de su felicidad y de su gloria. Amén.

Oración a la Santísima Virgen de Santo Tomás de Aquino

Virgen bondadosa, madre misericordiosa, yo os recomiendo mi cuerpo y mi alma, mis pensamientos y mis acciones, mi vida y mi muerte. Ayúdame, reina mía, y líbrame de todas las asechanzas del demonio. Concededme la gracia de amar a mi señor Jesucristo, vuestro hijo, con un amor verdadero y perfecto, y la de amaros después de él, oh Mariah, sobre todas las cosas. Amén.

Oración a la Santísima Virgen - El célebre canciller Gershon

Virgen bondadosa, madre misericordiosa, yo os recomiendo mi cuerpo y mi alma, mis pensamientos y mis acciones, mi vida y mi muerte. Ayudadme, oh reina mía, y líbrame de todas las asechanzas del demonio. Concédeme la gracia de amar a mi señor Jesucristo, nuestro hijo, con un amor verdadero y perfecto, y la de amaros después de él, oh mariah, sobre todas las cosas. Amén.

Oración a la Santísima Virgen del célebre canciller Gerson

Tomaría bendita entre todas las mujeres, pos sola a veces ha alejado la maldición, ha traído las bendiciones del todopoderoso y abierto las puertas del cielo. Sí, por eso se os invoca con el nombre de María, que significa estrella del mar, porque así como la estrella conduce a los navegantes al puerto, así esperamos, oh divina virgen, que nos conducirás también al eterno reposo donde os bendeciremos con todos los santos. Amén.

Oración a la Santísima Virgen del Cardenal Berilio

Madre de gracia y de misericordia, Dios es cojo por madre. Mi alma en honor y memoria del placer que el mismo Dios tuvo al elegiros como madre suya, reina de los ángeles y los hombres. Yo reconozco por mi soberana en consideración de la.

Oración a la Santísima Virgen de San Juan Damasceno

Salve María, esperanza en los cristianos y indulgente en escuchar los ruegos de un pecador que os ama con ternura, que os honra particularmente y que cifra en vos la esperanza en su salvación. A buscar debo la vida, por bush ha sido restituido a la gracia a nuestro divino hijo. No sois la más segura prenda de mi eterna felicidad. Miradme, oh santísima Virgen, del peso de mis pecados, disipad las tinieblas de mi espíritu, destruid las afecciones terrenales de mi corazón. Ante fuerzas para vencer las tentaciones de mis enemigos y presidid todas las acciones de mi vida. Para que, compuesto, amparado y dirigido, pueda obtener la

Oración a la Reina de San Efrén

Virgen purísima y sin tacha, Oh María, madre de Dios, reina del universo. Vuestro poder excede al de todos los santos. Sois la esperanza en los elegidos y la alegría de los bienaventurados. Pues nos habéis reconciliado con Dios. Vos sois la única ahogada en los pecadores y el puerto seguro de los náufragos. No sois el consuelo del mundo, la libertad de los cautivos, la salud de los enfermos, la alegría de los afligidos y la salvación de todos. Abuso maria de cubrimos de voz lo esperamos todos. Yo suplico que tengáis piedad de nosotros. Amén.

Oración a la Santísima Virgen de San Anselmo

Clementísima y sublime Reina, digna de socorrernos sin mirar la multitud de nuestros pecados. Acordaos que nuestro Creador se ha hecho carne en vuestro seno, no para condenar a los pecadores, sino para salvarlos. Si hubierais sido hecha madre de Dios solo en vuestro beneficio, podría decirse que nuestra salvación os era indiferente. Pero Dios se ha hecho hombre por vuestra salvación y la de todo el género humano. ¿De qué nos serviría vuestro poder y vuestra gloria si no nos hicieran partícipes de vuestra bienaventuranza? Indignados, ayudadnos y protegednos. A vos nos encomendamos, hacer que eternamente amemos y sirvamos a nuestro hijo Jesucristo. Amén.

Oración a la Santísima Virgen del Venerable Abad de Sillas

Oh Virgen amabilísima, habréis hallado gracia delante para concebir a su divino hijo y habéis recibido todas las gracias. Humildísima María, para asistirnos en nuestras necesidades. Como en efecto lo hacéis, nos ayudáis a los buenos sosteniendo los y socorres a los malos disponiendo los a recibir la divina misericordia. Los protegéis a los moribundos contra las asechanzas del demonio y los amparáis aun después de la muerte, recibiendo sus almas y conduciéndolas a la morada de los bienaventurados. A donde os suplicamos os dignéis conducirnos a todos también.

Dedicación a la soberana Virgen María

Dependencia en que Jesús, mi salvador y mi Dios, quiso vivir respecto de vos como su madre. En calidad de la soberana, os doy sobre mi alma todo el poder que está en mi mano daros. Oh Virgen Santísima, digna os miráis como cosa vuestra y tratáis por vuestra bondad como el objeto de vuestras misericordias. Amén.

Confianza en la protección de la Santísima Virgen

Oh Santísima Virgen de San Andrés de Cambio, en ti deposito toda mi confianza. Sé que si me acojo a tu protección, no tendré nada que temer. Tus siervos están armados con las armas de salvación que Dios ha concedido a sus predestinados. Oro para que tu divino hijo, mi salvador, me cuide y me proteja. Amén.

La Santísima Virgen como tesoro de santidad

Oh Santísima Virgen de San Juan Damasceno, tesoro de santidad y fuente de justicia. Eres el cielo vivo y animado, abismo y océano de gracias. Como esperanza de los cristianos, reina de los ángeles y señora de todas las criaturas, ruega por nosotros y haznos partícipes de la felicidad y la gloria que gozas en el cielo. Amén.

Súplicas a la Santísima Virgen

Oh Santísima Virgen de San Andrés de Candia, socórrenos con tus súplicas. Sabemos que tus súplicas son más preciosas y eficaces que todos los tesoros del mundo. Por ellas, el Señor se muestra propicio hacia nosotros y nos concede abundancia de gracias. Confiadamente, pedimos tu asistencia para alcanzar el perdón de nuestros pecados y practicar virtudes. Amén.

Amor y devoción a la Santísima Virgen

Gloriosa y Santísima Virgen, quiero que mi corazón siempre se abrace con tu amor y que mi alma sea siempre tuya. Madre mía, concédeme ser amada por Jesucristo, tu adorable hijo, que amó a los hombres hasta morir en la cruz por ellos. Confío en que Él no me negará esta gracia, tan importante para su gloria, que suplico me conceda por tu intercesión. Amén.

Súplica a la Santísima Virgen para superar las dificultades

Santísima Virgen de San Anselmo, digna de todo amor, te ruego que mi corazón siempre se aferre a tu amor y que mi alma te pertenezca por siempre. Concede esta gracia que tanto interesa a la gloria de Jesucristo, tu adorable hijo, quien murió por nosotros en la cruz. Deseo vivir solo de tu amor, para poder ser consumido en él y habitar eternamente en la morada de los bienaventurados. Amén.

Plegaria por la asistencia de la Santísima Virgen

Oh Santísima Madre de Dios, socórrenos con tu asistencia. Dirige tu mirada compasiva hacia nosotros, tus siervos, que conoces los peligros que nos rodean y el miserable estado en el que nos encontramos. Confiamos en tu gran misericordia porque te amamos y nos acogemos a tu protección. Ruega por nosotros para que podamos ver la gloria de la eterna felicidad. Amén.

Oración a la Santísima Virgen de San Metodio de Tesalónica

Hermanos, al Ciri o Constantino, nuestro nombre, o Santa Madre de Dios, contiene todas las gracias y todas las bendiciones divinas. Nos habéis llamado en nuestro seno al que es incomprensible y habéis alimentado al que alimenta a todas las criaturas, el que llena el cielo y la tierra, el que es el soberano de todas las cosas, ha querido seros deudor del vestido de carne que antes no tenía. ¡Regocijaos, oh Madre de Dios! Regocijados de tener por deudor al que da el ser a todas las criaturas. Todos somos deudores de Dios, pero puede decirse que Dios ha querido ser lo vuestro en cierto modo. Así es, madre amantísima, que vuestra caridad y vuestro crédito para con Dios sean a la caridad y al crédito de todos los santos. Nosotros celebramos nuestra gloria, sabemos cuán grande es vuestra bondad y os suplicamos que os acordéis de nosotros y de nuestras miserias. Amén.

Oración a la Santísima Virgen de San Efrén the Syrian

¡Oh Santa Madre de Dios! Signados, protegernos y conservarnos bajo las alas de nuestra piedad y de nuestra misericordia. En vos depositamos toda nuestra confianza, a voz nos hemos consagrado desde nuestra más tierna infancia como a nuestra soberana. Oh, sois el puerto en que nos refugiamos, oh Virgen Purísima, nosotros nos acogemos a vuestro amparo y deseamos ser siempre fieles. Amén.

Oración a la Santísima Virgen del bienaventurado San Alfonso Ligorio

Santa Madre de Dios, esperanza en los hombres, el precio de mi salvación está ya satisfecho, mi Salvador ha dado por ella toda su sangre, cuando una sola gota bastaría para rescatar millones de mundos. Sólo falta que el divino redentor me adjudique el mérito de esa preciosa sangre. A vos, santísima Virgen, recomiendo mi alma para que no la arrebate el enemigo. Amén.

Oración a la Santísima Virgen de San Germán de Borgoña

¡Oh soberana mía! Vos sois el consuelo que el mismo Dios me ha concedido. Sois mi guía en la peregrinación de este mundo, la fuerza en mi debilidad, la riqueza en mi miseria, el bálsamo que cura mis heridas, el consuelo en mis dolores y la libertadora que rompe mis cadenas. Enaos, ¡oh Virgen Santa!, escuchad las humildes súplicas de vuestro siervo y compadeceos de mis lágrimas. Busco sois mi paciencia, mi refugio, mi esperanza, mi salvación y mi apoyo. Amén.

Oración a la Santísima Virgen de San Guillermo de París

A vos recurro, ¡oh gloriosa Madre de Dios!, aquí en la Santa Iglesia llámanos Madre de Misericordia. ¡Oh Santa María, la que nunca ha sufrido repulsa del Señor y cuya misericordia no ha faltado nunca a nadie, cuya clemencia no ha desoído la súplica del desdichado! No quiera Dios, ¡oh Intercesora de los hombres!

Oración a la Santísima Virgen de San Bernardo

O madre y señora mía, *mis pecados me hacen indigno de llegar hasta vos y sólo tengo derecho a esperar castigos*. Pero aun cuando me rechazáis, aun cuando me quitasteis la vida, yo nunca dudaría de que vuestra voluntad es salvarme. En vos deposito toda mi confianza y, puesto que soy bastante dichoso para implorar siempre vuestra misericordia, tengo la firme esperanza de alabaros en el cielo, *como esa multitud de siervos vuestros que se han salvado por vuestra intercesión*. Amén.

Oración en honor de la Santísima Virgen de San Buenaventura

*Madre y señora mía, mis pecados me hacen indigno de llegar hasta vos y sólo tengo derecho a esperar castigos*. Pero aun cuando me rechazáis, aun cuando me quitasteis la vida, yo nunca dudaría de que vuestra voluntad es salvarme. En vos deposito toda mi confianza y, puesto que soy bastante dichoso para implorar siempre vuestra misericordia, tengo la firme esperanza de alabaros en el cielo, como esa multitud de siervos vuestros que se han salvado por vuestra intercesión. Amén.

Oración a la Santísima Virgen de San Epifanio de Salames

O madre de Dios, madre de misericordia, socórreme durante el curso de mi vida y líbrame de los ataques de mis enemigos. En la hora de mi muerte, conserva mi pobre alma y disipa el tenebroso aspecto de los demonios en el momento supremo de mi juicio. Rescátame de la eterna condenación, colócame en el número de los santos y hazme entrar en la gloria a nuestro divino hijo y participar de la herencia de los hijos de Dios. Amén.

Oración a la Santísima Virgen sacada de la paráfrasis de sus letanías

Tu divina madre de la gracia, por vos ha venido hasta nosotros el autor de todas las gracias y las voces todas desde el principio de nuestra inmaculada con...

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