Una cerveza con propósito: Coronita honra a las benditas almas del purgatorio

En este blog religioso cristiano, encontraremos una recopilación de rezos, oraciones y plegarias para fortalecer nuestra fe y conectarnos con Dios. En momentos de dificultades o simplemente para elevar nuestra gratitud al Señor, estas palabras nos guiarán en nuestras reflexiones y encuentros espirituales.

Coronita por las benditas almas del purgatorio

Coronita por las benditas almas del purgatorio

Empecemos esta plegaria por las benditas almas del purgatorio, invocando al poderoso nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Que Dios nos libre de nuestros enemigos. Amén.

María, reina del purgatorio, te pedimos intercedas por aquellas almas por las cuales tenemos o podamos tener alguna obligación, ya sea de caridad o de justicia. Pedimos por su descanso eterno y para que brille sobre ellas la luz perpetua. Amén.

Dios te salve, María, llena eres de gracia. El Señor está contigo. Bendita eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, madre de Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Dale, Señor, el descanso eterno y haz que la luz perpetua brille sobre ellas. Que descansen en paz. Amén.

Oración por las almas abandonadas y olvidadas

María, reina del purgatorio, te rogamos por las almas más abandonadas y olvidadas, aquellas que nadie recuerda. Te pedimos que apliques sobre ellas los méritos de la pasión de Jesús, los tuyos y los de los santos, para que alcancen el eterno descanso. Amén.

Dios te salve, María, llena eres de gracia. El Señor está contigo. Bendita eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, madre de Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Dale, Señor, el descanso eterno y haz que la luz perpetua brille sobre ella. Que descansen en paz. Amén.

Oración por las almas que deben salir pronto del purgatorio

María, reina del purgatorio, te rogamos por aquellas almas que han de salir más pronto de ese lugar de sufrimiento. Pedimos que, cuanto antes, se unan a ti para cantar las eternas misericordias del Señor. Amén.

Dios te salve, María, llena eres de gracia. El Señor está contigo. Bendita eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, madre de Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Dale, Señor, el descanso eterno y haz que la luz perpetua brille sobre ellas. Que descansen en paz. Amén.

Oración por las almas que padecen más tiempo en el purgatorio

María, reina del purgatorio, te rogamos especialmente por aquellas almas que más padecen. Sabemos que todas ellas sufren con resignación, pero algunas atraviesan penas atroces que no podemos imaginar. Intercede por ellas, madre nuestra, y Dios escuchará tu oración. Amén.

Dios te salve, María, llena eres de gracia. El Señor está contigo. Bendita eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, madre de Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Dale, Señor, el descanso eterno y busca para ellas la luz perpetua. Que descansen en paz. Amén.

Oración a la Virgen María

Eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre Jesús. Santa María, madre de Dios,

ruega por nosotros pecadores ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Oración por las benditas ánimas del purgatorio

Dale señor el descanso eterno y luzca para ellas la luz perpetua. Descansen en paz. Amén.

Petición a la Virgen Santísima

Virgen Santísima, te pido que así como me acuerdo de las benditas ánimas del purgatorio, se acuerden de mí y los

demás. Siete avemarías ya acepté facer por mis pecados. En ti, madre mía, pongo toda mi confianza de hijo y sé

que no he de quedar defraudado. Amén.

Padre Nuestro

Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre. Venga a nosotros tu reino, hágase tu

voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día. Perdona nuestras ofensas, como

también nosotros perdonamos a los que nos ofenden. No nos dejes caer en tentación y líbranos del mal. Amén.

Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre. Venga a nosotros tu reino, hágase tu

voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día. Perdona nuestras ofensas, como

también nosotros perdonamos a los que nos ofenden. No nos dejes caer en tentación y líbranos del mal. Amén.

Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre. Venga a nosotros tu reino, hágase tu

voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día. Perdona nuestras ofensas, como

también nosotros perdonamos a los que nos ofenden. No nos dejes caer en tentación y líbranos del mal. Amén.

Avemaría

Dios te salve María, llena eres de gracia. El Señor es contigo, bendita tú eres entre todas las mujeres y

bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, madre de Dios, ruega por nosotros pecadores ahora y en

la hora de nuestra muerte. Amén.

Dios te salve María, llena eres de gracia. El Señor es contigo, bendita tú eres entre todas las mujeres y

bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, madre de Dios, ruega por nosotros pecadores ahora y en

la hora de nuestra muerte. Amén.

Dios te salve María, llena eres de gracia. El Señor es contigo, bendita tú eres entre todas las mujeres y

bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, madre de Dios, ruega por nosotros pecadores ahora y en

la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria al Padre

Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo, como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos

de los siglos. Amén.

Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo, como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos

de los siglos. Amén.

Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo, como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos

de los siglos. Amén.

Al Espíritu Santo, como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén. Gracias por escuchar esta oración.

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Gracias, gracias, gracias. Dios los bendiga.

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