8 NOVENA A SANTA MARIANA DE JESÚS PAREDES Y FLORES DIA OCTAVO

Novena a Santa Mariana de Jesús: Fortaleza y Fe en tiempos difíciles

Día primero: Acto de Contrición

Señor mío Jesucristo crucificado por mi amor, que no quieres la muerte del pecador sino que se convierta a Ti y viva la verdadera vida de gracia, ten misericordia y perdóname por tu sagrado corazón, manantial de bondad y mansedumbre. Las innumerables culpas que he cometido hasta el presente, las detesto de corazón. Todas en general, cada una de ellas en particular. Propongo, auxiliado por tu divina gracia, "antes morir que pecar". Amén.

Oración para todos los días

Dulcísimo Jesús mío, que como nos enseña la Santa Madre Iglesia, estás entre las azucenas, pusiste los ojos desde la eternidad en la fragantísima su cena de Quito. Y luego de que le diste el ser, la preveniste con todas las bendiciones de dulzura que sueles derramar sobre las almas en las que has de poner tu trono. Heme aquí postrado ante vuestra majestad, implorando tu divina misericordia por los méritos de tu fiel sierva y amantísima esposa, Mariana de Jesús. Dame, Señor, que por la perfecta imitación de sus heroicas virtudes, sea yo buen olor tuyo en todo lugar, para que en todas partes sea glorificado por mí tu santo nombre. Amén.

Día octavo: Segunda oración para todos los días

Bendito sea, una y mil veces, Dios mío, uno en esencia y trino en personas. Por las innumerables gracias de que con más gracia diste a vuestra cordialísima adoradora, la bienaventurada Mariana de Jesús, en el decoro de su ejemplar y santa vida. Y por los beneficios singulares que haces a los que la invocan con fe viva en cualquier tribulación, especialmente las pestes y terremotos. Seguid, Señor, dispensando a todos sus verdaderos devotos las mercedes que os pidan por su intercesión. Y no me negaréis la que os pido en esta novena, si ha de servir para mi eterna salvación. Amén.

Continuamos

Ahora harás pausa para pedir mentalmente a la Santísima Trinidad las gracias que deseas alcanzar por los méritos de la santa...

Padre Nuestro

Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre. Venga a nosotros tu reino. Hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día. Perdona nuestras ofensas como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden. No nos dejes caer en tentación y líbranos del mal. Amén.

Avemaría

Dios te salve María, llena eres de gracia. El Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria

Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo, como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Oración a Santa Mariana de Jesús

Ruega por nosotros, bienaventurada Mariana de Jesús, para que seamos dignos de las promesas de Cristo. Oremos.

Oh Dios, que aún entre los atractivos del siglo hicisteis floreciente a Santa Mariana en castidad virginal y perpetua penitencia, como a su cena entre espinas os rogamos hagáis que por sus méritos e intercesión nos retraigamos de los vicios y sigamos lo más perfecto por Cristo, Señor nuestro. Amén.

Preses a Santa Mariana de Jesús

Bienaventurada Virgen Mariana, escogida por Jesús desde tus más tiernos años como bellísima su cena, para ser trasladada al paraíso celestial, cultivada por sus divinas manos y regada por los suaves y moss arroyos.

Implorando piedad y gracia divina

De sus gracias, henos aquí postrados a tus pies, implorando piedad para que por tus grandes merecimientos, por aquella virginal inocencia y por aquel candor angelical con el que tu divino esposo te adornó y enriqueció, nos consigas la gracia de pasar una vida, si no tan inocente como la tuya, al menos sin ofender gravemente al Señor. Lavando nuestras culpas y defectos en las saludables fuentes de la penitencia y cumpliendo exactamente la ley santa del Señor y las obligaciones de nuestro estado, para que podamos al fin de nuestros días ser plantas agradables al Señor y dignas de ser colocadas en los jardines eternos del cielo. Amén.

Rezos a la Santísima Trinidad

Ahora se rezan tres padres nuestros, tres avemarías y tres glorias en honor de la Santísima Trinidad, por la devoción que Mariana de Jesús tuvo a este sagrado misterio.

Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre. Venga a nosotros tu reino. Hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día. Perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden. No nos dejes caer en tentación y líbranos del mal. Amén.

Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo, como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo

"Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo, como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén."

Oración a Santa Mariana de Jesús por la Patria

¡Bienaventurada Mariana de Jesús, blanquísima a su cena de Quito! A través de fervorosas y continuas oraciones, ofreciste al Señor las necesidades de tus conciudadanos. Con tus heroicos y singulares ejemplos de virtudes, los estimulaste hacia el bien y la austeridad, y con mayor penitencia aplacaste la cólera divina debido a los pecados. Además, ofreciste tu preciosa vida en la flor de la juventud para rescatar a tu patria del abismo en que la habían sumido la religión y la inmoralidad.

Ruega por nosotros, Santa Mariana de Jesús

"Ruega por nosotros, bienaventurada Mariana de Jesús, para que seamos dignos de las promesas de Cristo."

Oración a Santa Mariana de Jesús por la Patria (continuación)

Tú, querida celestial doncella y santa hermana nuestra, intercede por nuestra patria. Defiéndela de sus enemigos y presérvale del contagio de errores disociadores y anticristianos. Comunica a nuestras doncellas tu pudor y modestia, y que el sacrificio heroico que hiciste en tu vida por la patria sea fecundo en frutos de virtudes cristianas y cívicas.

Oración a Santa Mariana de Jesús por la Patria (conclusión)

Florezca en nuestra patria el orden, la paz y la concordia, bajo cuya sombra todos sus hijos puedan trabajar unidos por su prosperidad. Que la fe se restaure en los corazones, que los hogares recuperen la santidad de las costumbres y que nuestras comunidades estén libres de la peste del laicismo. Que en nuestra vida ciudadana y política prevalezcan las normas del Evangelio de Jesucristo.

Oración por la patria y la defensa de la iglesia

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, amén.

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